Frank Sinatra acumuló a lo largo de su vida un sinfín de historias, mitos y anécdotas que ayudaron a cimentar su aura de leyenda. Pero entre los relatos más difundidos se encuentra aquel que asegura que el interprete de “Ol’ Blue Eyes” estaba particularmente bien dotado.
Ahora, Paul Anka, uno de sus amigos más cercanos y colaboradores musicales, ha vuelto a encender esa conversación al confirmar públicamente el rumor.
El cantante de 84 años habló sobre el tema en una entrevista reciente con Page Six contestó ante la pregunta: “Sí, era enorme. ¡No sé qué te haga eso a ti!”.
El comentario surgió cuando el intérprete de “Diana” recordaba sus años junto a Frank Sinatra y el famoso Rat Pack, el grupo de artistas que dominó el entretenimiento en Las Vegas durante los años 50 y 60.
Dean Martin, Sammy Davis Jr., Peter Lawford y Joey Bishop formaban parte de ese círculo íntimo donde las bromas, la camaradería y los excesos eran parte del día a día. Entre esas actividades, relató Anka, estaba frecuentar juntos las saunas de los hoteles de lujo donde se presentaban.
“Tenía problemas para mantener el contacto visual”, bromeó, refiriéndose sin rodeos a la anatomía del cantante. La revelación, aunque irreverente, no es nueva dentro del imaginario popular.
Desde hace décadas, el tema forma parte del folclor que rodea a Sinatra, alimentado por testimonios de figuras cercanas, especialmente el de su segunda esposa, la actriz Ava Gardner.
Gardner, considerada una de las grandes divas del Hollywood clásico, supuestamente desató el rumor después de que un periodista le preguntara por qué seguía con Frank pese a la intensidad de las peleas que se reportaban entre ambos.
Su respuesta, según recogen múltiples biografías, fue tan directa como memorable: “Bueno, te diré algo: diecinueve libras es una mierda”. Aunque la frase es imposible de verificar por completo, ha sido citada a lo largo de los años como una de las anécdotas más célebres de su relación.
Frank Sinatra y Ava Gardner estuvieron casados entre 1951 y 1957, después de que el cantante terminara su matrimonio con Nancy Barbato, su primera esposa y madre de sus hijos, con quien estuvo de 1939 a 1951.
Tras su turbulenta separación de Gardner, Sinatra rehízo su vida sentimental en otras tres ocasiones. En 1966 contrajo matrimonio con Mia Farrow, unión que duró hasta 1968. Más adelante, en 1976, se casó con Barbara Marx, con quien permaneció hasta su muerte en 1998 a los 82 años.
Marx, en su libro de memorias Lady Blue Eyes: My Life With Frank Sinatra (2011), describió al cantante como un hombre irresistible para las mujeres, carismático y gentil.
“Frank atraía a las mujeres. No podía evitarlo. Solo con mirarlo, por la forma en que se movía y se comportaba, sabías que era un gran amante y un verdadero caballero”, escribió.
A 26 años de su muerte, Frank Sinatra continúa ocupando un lugar central en la cultura popular, ahora incluso desde las anécdotas más íntimas, que siguen alimentando la leyenda de un artista irrepetible.