El II Encuentro Regional de Puntos de Cultura Comunitaria congregó a agrupaciones de las nueve comunas de la región, incorporó a 11 nuevos colectivos y reafirmó el valor del trabajo cultural que emerge desde los barrios, fortaleciendo la articulación, la identidad y la participación ciudadana.
El compromiso de Atacama con una cultura participativa, descentralizada y vinculada a la identidad territorial quedó reafirmado este fin de semana con la realización del “II Encuentro Regional de Puntos de Cultura Comunitaria 2025”, instancia organizada por la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio que reunió a 42 organizaciones provenientes de las nueve comunas de la región. La jornada permitió profundizar el trabajo colaborativo entre agrupaciones comunitarias, fortalecer redes territoriales y reconocer el aporte de cada organización en la vida cultural de sus comunidades.
Uno de los hitos destacados del encuentro fue la incorporación de 11 nuevos Puntos de Cultura Comunitaria (PCC), quienes recibieron su certificado y se integraron formalmente a la red regional. Con ello, Atacama alcanza los 42 PCC acreditados, reflejando una presencia territorial amplia y una creciente diversidad de expresiones culturales que abarcan circo, danza, música, artesanía, alfarería, oficios tradicionales, iniciativas de memoria comunitaria y proyectos socioeducativos, entre otros.
PROGRAMA
El programa PCC, creado para reconocer, fortalecer y visibilizar el trabajo cultural de base comunitaria en todo el país, ha permitido que organizaciones territoriales accedan a herramientas de gestión, acompañamiento metodológico, oportunidades de vinculación, apoyo técnico y recursos que contribuyen al desarrollo de iniciativas locales. En Atacama, este enfoque ha posibilitado que agrupaciones de distintos territorios generen proyectos que dialogan con su identidad, su memoria y sus realidades sociales, incluso en localidades apartadas de los centros urbanos.
Durante la jornada, las organizaciones participaron en círculos de experiencias, talleres metodológicos e instancias de articulación territorial, en las cuales reflexionaron sobre sus procesos, compartieron aprendizajes y proyectaron líneas de acción compartidas para seguir fortaleciendo la cultura en los territorios. Estos espacios también permitieron profundizar la gobernanza interna de la red regional y visualizar los desafíos comunes para el próximo periodo.
La Seremi (s) de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de Atacama, Paulina Palavecino López, destacó el rol creciente de las comunidades en la construcción del ecosistema cultural regional. “Este segundo encuentro de puntos de cultura comunitaria cuenta con representantes de organizaciones de las nueve comunas de la región, y es muy importante para nosotros como ministerio, ya que este encuentro nos brinda la posibilidad de reflexionar en torno al trabajo cultural que se está realizando en los territorios, además de intercambiar ideas y experiencias. Este año dimos la bienvenida a 11 organizaciones al programa, llegando a 42 Puntos de Cultura Comunitaria acreditados en Atacama, y hoy les entregamos una certificación que da cuenta de su integración al trabajo conjunto que estamos desarrollando”.
VALORACIÓN
Desde las agrupaciones participantes, la valoración del programa se hizo sentir con fuerza. Javiera Godoy, directora de la Fundación Cultural Somos Gigantes de Paipote, señaló que “ha sido una experiencia muy bonita y enriquecedora. Este encuentro nos ha permitido conocer distintas organizaciones de la región que están en gestiones y coordinaciones similares a las nuestras. Encontrarse en una red donde vemos que las comunidades se están activando y que la cultura parte desde el territorio es muy lindo y gratificante. Recomiendo que las organizaciones postulen a este programa porque contarán con apoyo institucional y recursos para llevar adelante sus iniciativas, pero también con un espacio para compartir experiencias”.
Desde la institucionalidad nacional, la jefa del Departamento de Ciudadanía Cultural del Ministerio, Marianela Riquelme, subrayó la relevancia estratégica del programa PCC en la democratización cultural. “La importancia de este encuentro es que permite que los Puntos de Cultura Comunitaria se conozcan, dialoguen entre ellos, generen articulación y se vinculen para desarrollar la cultura que hay en los territorios, porque la cultura nace de los territorios. Ser un punto de cultura es el reconocimiento de lo que las organizaciones hacen en sus comunidades, y lo que estamos haciendo como Ministerio es poner en valor esas actividades sociales y culturales que históricamente han sostenido la vida comunitaria”, comentó.
Para las agrupaciones con trayectoria, este proceso abre nuevas oportunidades. Así lo expresó Claudio Brizuela, integrante del Conjunto Folclórico del Magisterio Raíces del Huasco, de Vallenar. “Es importante que nuestra agrupación forme parte de los PCC, ya que ingresamos a un periodo de difusión mucho más avanzado. Son 40 años de trayectoria y esta es una etapa decisiva que nos permitirá difundir lo que hacemos para toda la región y, por supuesto, para todo Chile”.
El II Encuentro Regional de Puntos de Cultura Comunitaria dejó en evidencia que la cultura en Atacama se construye y se proyecta desde sus comunidades. La amplia participación, la incorporación de nuevas organizaciones y la consolidación de redes regionales permiten anticipar un 2026 en el que el trabajo colaborativo seguirá fortaleciendo el patrimonio vivo y la identidad de los territorios. Con este impulso, Atacama continúa posicionándose como un territorio donde la cultura comunitaria se reconoce, se valora y se multiplica.