Los gobiernos de Alemania, Polonia y Noruega anunciaron que en conjunto gastarán 500 millones de dólares para comprar armamento a Estados Unidos, el que después enviarán a Ucrania para ayudar a ese país a hacer frente a la invasión rusa, en el marco de la iniciativa denominada Lista de Requerimientos Prioritarios de Ucrania.
La iniciativa contempla la adquisición de armas y municiones fabricadas en EE.UU., consideradas por Kiev como claves para su defensa frente a la agresión de Moscú.
«Polonia está encantada de unirse a Noruega y Alemania en un paquete del programa estadounidense de apoyo a Ucrania, juntos, la suma considerable de 500 millones de dólares. Esperamos que Estados Unidos lo note, que Ucrania lo note», dijo el canciller polaco, Radosław Sikorski, junto a homólogos de Alemania, Johann Wadephul; y de Noruega, Espen Barth Eide.
Para el ministro noruego, lo que hace falta es una Ucrania «fuerte y bien armada», y por ese motivo Oslo está «orgulloso de unirse a la iniciativa».
A inicios de diciembre, el presidente Ucrania, Volodímir Zelenski, se reunió en París con el CEO de Dassault Aviation, fabricante del caza polivalente de 4ª generación Rafale.